Lactancia en Hispánoamérica
Segunda Parte : República Dominicana
Por Mar del Sur
Por Mar del Sur
Hace una
semana concluyó la Semana Mundial de la Lactancia Materna, impulsada
sobre todo por UNICEF. Nosotros hemos aprovechado esa oportunidad
para promover los beneficios de la lactancia materna.
Entre esos
beneficios destacan por supuesto los alimenticios, ya que la leche
materna fortalece el sistema inmunológico del niño y previene
muchas enfermedades de la infancia; incluso es un factor fundamental
que puede impedir el desarrollo de enfermedades durante la adultez.
Pero también hemos insistido en que la lactancia es parte de un
proceso más complejo que inside en la salud emocional, física y
psicológica tanto del bebé como de la madre. Durante la lactancia
se transmite amor y seguridad al niño, y se fundan las bases de su
autoestima. La lactancia también beneficia a la
madre reduciendo los riesgos del cáncer de mama y
osteoporosis, entre otros.
Sin embargo,
también hemos señalado que la lactancia forma parte de un proceso
más amplio que abarca a toda la sociedad. No es casual, por ejemplo,
que la lactancia esté en retroceso en todo el mundo, mientras que el
consumo de productos industriales aumenta, así como la inserción de
las mujeres en la economía mundial. Tampoco es casual que mientras
la lactancia retrocede, sobre todo en los países más desarrollados,
también ahí aumentan alarmantemente las enfermedades infantiles.
Este proceso
social en el que se inserta la lactancia no es lineal. Es más bien
un proceso contradictorio en el que además inciden muchos factores.
En este sentido, el impulso que está teniendo la lactancia desde los
organismos de salud internacionales está relacionado con los altos
costos para los servicios públicos de salud que genera tener niños
enfermos, resultado de una lactancia deficiente. Pero, además, esta
situación se ha visto aún más agravada por la crisis de alimentos
en el mundo, lo que ha llevado a los países a impulsar una amplia
gama de programas para aliviar la situación de pobreza extrema e
inseguridad alimentaria, que incluyen la promoción de la lactancia
materna y la complementación alimentaria a mujeres embarazadas y en
período de lactancia, así como a niños y niñas lactantes y
preescolares.
En nuestro
continente, la zona centroamericana y del caribe es de las más
afectadas por esta situación. En República Dominicana, por ejemplo,
se padece la situación más extrema en cuanto a lactancia materna se
refiere. Ahí sólo un 8% de los recién nacidos lactan de manera
exclusiva los primeros seis meses, lo que coloca a esa nación en el
lugar más bajo en Latinoamérica, seguido por México con un 14.5% y
Paraguay con un 24.4%. Como decíamos, esto se debe a diversas
razones, pues aunque se trata de un país pobre y poco desarrollado,
en Dominicana el 67.2% de las madres pertenecientes a clase media
alta o alta ofrecen un suplemento antes de amamantar, en comparación
con un 40.2% de las que pertenecen a la clase pobre.
Yanet Olivares,
presidenta de la Liga de la Leche en República Dominicana, ha
denunciado que un problema fundamental es el deficiente protocolo
médico que separa al recién nacido de la madre en el momento mismo
de nacer. También ha hablado sobre los mitos que acompañan a la
mujer mucho antes de dar a luz: falsas creencias como que a las
mujeres se les caen los senos si dan de mamar, que no ,pueden comer
tal o cual cosa, que no pueden dormir con el bebé, que no deben
alimentar al bebé cuando tenga hambre sino que deben sujetarlo a
horarios fijos, que deben aternar los
pechos cada 10 minutos y, sobre todo, que
después de los seis meses hay que quitarle el pecho para darle otros
alimentos.
Así pues,
como la propia Olivares señala, no sirve de mucho el esfuerzo de un
grupo si la autoridad dominicana no hace respetar la ley 8-95 que
fomenta la lactancia y que data desde 1995. Pero como hemos visto
tampoco se trata sólo de un problema burocrático, es también
fundamental la mejora en las condiciones socio-económicas de toda la
sociedad, terminar con el control de las grandes empresas sobre la
alimentación de la sociedad, así como la explotación de las
mujeres en los centros de trabajo y que puedan desarrollar plenamente
su maternidad.
Ley No. 8-95 que declara
como prioridad nacional la Promoción y Fomento de la Lactancia
Materna
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Queremos saber que piensas ¡Participa!